La alfabetización mediática, proceso por el que se crean capacidades de acceso a medios de comunicación (hoy también en Internet), consumo y análisis de su información y difusión, es una necesidad para la población, más en un escenario de post verdad y desinformación como el que vivimos hoy.
En este contexto, el proyecto Digimente elaboró una malla curricular sobre alfabetización mediática, adaptaba al contexto latinoamericano, para encarar estos procesos de capacitación a través de 2 recursos:
- La malla curricular, que está disponible en pdf para todo aquel que quiera consultarlo y tomar una o más competencias para adaptarlas en un plan de formación, entonces sirve tanto para un docente de aula como para una academia, instituto, emprendedor, etc.
- Curso online sobre alfabetización mediática. Disponible a través de su sitio web: digimente.org donde se puede acceder, previo registro, a una capacitación gratuita.
Para ambos casos, el currículo está distribuido en los siguientes cuatro módulos:
- Evaluar información críticamente: ¿Qué dice la información y por qué lo dice?
- Producir contenidos creativamente: ¿Cómo creo y comparto contenidos?
- Participar activamente: ¿Qué normas y valores guían mi vida en medios?
- Pensar y reflexionar éticamente: ¿Qué significa ser parte de una comunidad?
Cada uno de los módulos despliega objetivos, habilidades y disposiciones que busca desarrollar, así como una propuesta pedagógica, didáctica y de evaluación, más una descripción de la malla curricular.
Un currículo TIC para la realidad latinoamericana
En la última década, varias organizaciones internacionales y países han centrado sus esfuerzos para afrontar el desafío de la transformación digital usando como instrumentos la elaboración de mallas curriculares de alfabetización digital.
Sin embargo, muchos de ellos están contextualizados a la realidad Europea o de Estados Unidos, que no atraviesa el problema de brecha de acceso que se viven en países de América Latina.
Como explica el Marco y malla curricular Digimente: «Latinoamérica es una de las regiones más desiguales del mundo, con brechas estructurales que van desde las socioeconómicas hasta las educativas, y que pasan también por las digitales».
Por tanto, «el acceso, uso, motivación y conocimiento de los medios y las TIC es diferencial en las sociedades latinoamericanas de acuerdo a estrato social, género, raza y región geográfica». Ahí precisamente radica el valor de este recurso.